¡Qué ciego había estado toda mi vida! Siempre creyendo en cosas que no son reales, cosas de las que poco a poco te vas dan cuenta gracias a la experiencia que te da la vida.
Hace unos años creí conocer el amor, creí que aquella chica me iba a durar mucho porque había entrado en mi corazón... Cuan equivocado estaba. Resultó ser que estar con ella no me hacía ver la realidad, veía otra realidad, con otros ojos, tras un velo que difuminaba lo que de verdad era...
Una vez que desapareció de mi vida, comencé a comprender que las cosas no eran como yo creía que eran.
"De los errores se aprende"
Mucho tiempo adelante apareció otra persona, que aparentaba ser una cosa, realmente era todo lo contrario. Como se suele decir era un lobo con piel de oveja. Te pintaba las cosas muy bonitas, hacía cosas por ella para observar el trascurso de la relación y lo único que estaba haciendo era aprovechándose de uno mismo para nada, porque no daba nada a cambio. Hasta que un cierto día decidió hacer una "honorable" hazaña para ridiculizarme con un sarta de tonterías y mentiras.
Esto no le funcionó, es más, le salió el tiro por la culata. Cuando hizo eso, ella se dio cuenta de que había errado y al cabo de un tiempo se rebajó a lo más mínimo pidiendo disculpas por sus actos, en un vago intento de llamar mi atención para que volviera a su lado... Pero era demasiado tarde...
Demasiado tarde dije... Ya había conocido a otra mujer (sí, mujer). Una mujer que me está haciendo madurar, me hace ver las cosas desde otro punto de vista.
Una mujer que desde el primer día entro en mi corazón para no salir. Con anterioridad, creí estar enamorado de una chica; realmente, ¿qué tenía? No tenía nada. Todo lo que tenía era un falso sentimiento que, no hace mucho, me di cuenta que no era nada, simple aprecio. Que el verdadero amor es el que yo siento ahora por esta mujercita.
Por fin puedo decir que he estado enamorado alguna vez en la vida de alguien. Al fin aprendí lo que es el amor y lo que es sufrir por una persona, aprendí la diferencia entre tener un simple aprecio, querer a alguien y amar.
Ahora que sé todo esto, voy a luchar con todas mis energías, y cuando no tenga más, las pediré prestadas si es necesario. Lucharé para estar a su lado durante mucho tiempo para hacerla feliz, quererla, darle mimos, besos, darle todo lo que tengo, haciendo cosas inimaginables que, si te paras a pensar, en condiciones normales no las harías.
Y todo ¿por qué? Esta pregunta es sencilla, porque la quiero, porque la amo.
"GRACIAS ZAMORA por darnos a estas zamoranas tan amables que saben como complacer y no ser falsas" (Ironía)
Guardián MaqvE, 25 de octubre de 2009 ©